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Es mercado del arte fagocita todo lo que se produce susceptible de ser vendido, comprado, alquilado, etc., …
En el año 2001, el artista belga Wim Delvoye provocó al público de Zúrich con una instalación en el museo Migros de Arte Contemporáneo, denominada «Cloaca».
Era la primera instalación en el mundo que reproducía el proceso de la digestión. La «máquina de mierda», (nombre con el que el autor se refiere a su obra), era una cadena de recipientes, tubos y bombas de unadocena de metros. Alimentada diariamente, (con los restos de la cafetería, suponemos), la máquina los procesa con enzimas, bacterias. etc., … para reproducir la digestión humana.
No es la primera vez que se utiliza la escatología en el arte. Hace casi cuarenta años, en 1961 el artista conceptual Piero Manzoni, produjo 90 latas firmadas por él, con sus excrementos dentro. Quería criticar radicalmente al mercado del arte, que ante una firma de renombre provoca aumentos irracionales en el precio de una obra. Pero no faltaron museos que compraron una de esas latas, es el caso del MOMA de Nueva York. Y la lata que subastó Sotheby’s en el 2007 se remató a 124.000 euros. Como es obvio corren rumores sobre el contenido real de las latas, pero nadie las ha abierto aún: no quieren perder su inversión. Y claro, tiene página web oficial.
La «Cloaca», que también cuenta con su propia página web, se ha exhibido por todo el mundo en diferentes museos. Como podemos ver en las siguientes imágenes de los que ha visitado alguna de las diferentes versiones de la Cloaca (Click picture to enlarge):