Parece que el arte se ha convertido en espectáculo, en propiedad privada, en mercancia, en inversión, en moda.
En los últimos tiempos se ha producido 2 cambios en el mercado del arte, uno que el arte contemporáneo se vea no porque guste, sino para decir que se ha visto. Es decir, que estamos ante obras estrella, obras célebres. Una característica óptima para vender, por lo tanto es la obra en la que hay que invertir. Este es el segundo cambio. Se invierte no por el gusto de coleccionista, sino por la oportunidad de inversión. Ya está convertido el arte en una mercancía. Y comienza a llegar el dinero en masa, apareciendo el espíritu especulativo.
Estos 2 cambios, junto a la aparición del señuelo de la novedad, de la moda, de lo último, … retroalimenta la especulación, provocando el alza de precios que los museos no pueden soportar y que empuja a las obras de arte celebres hacia colecciones particulares.
Obras que debieran ser de la humanidad, y estar a su disposición en los museos; se han convertido en un bien escaso y caro, en manos privadas. En «inversiones seguras», y mas grave: en obras invisibles para la humanidad.
Para complicar el panorama, actualmente, el mercado del arte es un mercado no regulado, de hecho el segundo mercado no regulado del mundo.
Sin embargo el precio de las obras de arte, a empezado a bajar: cerca un 30 % en los últimos años, por un exceso de mercado (20) y un exceso de precio (10). Luego sería fácil predecir un descenso de un 20 % mas por la crisis. ¿ Hasta donde ?
Hasta como en el cuento del traje del rey … ¿ quien dirá que el rey está desnudo ?
