Arte actual

Que el arte ya es un objeto con valor económico es innegable, la prueba es que hay artistas que realizan obras con criterio comercial y coleccionistas que compran obras como inversión.

Las casas de subastas Sotheby’s, Christie’s y Phillips, con el 95% del volumen de negocios de las ventas internacionales lideran el movimiento económico. Le siguen otros sujetos como los “Fondos de Inversión en Arte”, ya claramente con interes especulativo, como el conocido caso que protagonizó la Empresa Pública de Ferrocarriles de Gran Bretaña, la cual asesorada por Sotheby´s, invirtió 75 millones de dolares en obras de arte, para posteriormente venderlas con un retorno del 13% anual, que incluso podría haber sido del 20% anual si hubieran retrasado la venta 5 años. Existen mas agentes que actúan en el mercado de arte, como las Ferias de Arte y las Galerías Internacionales, … y en la “venta al detalle” de/por los independientes, locales, etc., ….

Si bien el mercado ha sido pujante, sin embargo desde el punto de vista artístico, en los últimos treinta años, hemos asistido a una sequía de nuevas corrientes y al permanente reciclado de movimientos anteriores como movimientos NEO disfrazados como nuevo arte o directamente como neo. Pocos casos: el arte africano, el de las minorías … han aparecido como novedades reales. Pero lo interesante del mercado de arte contemporáneo es que se define al mismo tiempo que se produce, es un caso de interactuación directa. No es un estilo definido dentro de un tiempo, sino que las obras describen la situación de la sociedad e individuo. Por ello el arte contemporáneo discurre con las personas y los lugares.
El tiempo pasa rápidamente, a veces nos cuesta recordar que aquello que se definió como las vanguardias queda ya muy lejos en el tiempo, tanto, que casi habría que llamarlas retaguardias.
Y la realidad es la sequía de las 2 últimas décadas, aunque exista la Cultura Oficial por un lado, y el Manifiesto Hartista por otro.

Autor entrada: pincel